Año tras año, las corporaciones masivas y sus jefes ultraricos ganan miles de millones al beneficiarse de los californianos y de nuestros hogares, y los más ricos se están volviendo más ricos con la pandemia. Juntos controlan nuestros hogares, la tierra en la que están construidas nuestras comunidades, quién puede vivir en ella y por cuánto. A través de grupos de fachada como la Asociación de Apartamentos de California, la Asociación de Agentes de Bienes y Raíces de California y la Mesa Redonda de Negocios de California, gastan millones para mantener el control sobre este sistema manipulado y asegurarse de que nadie los detenga.

Los californianos quieren hogares y comunidades estables donde prosperen sus familias y su futuro. Pero muchos de nuestros políticos, en cambio, venden nuestros sueños para maximizar las ganancias corporativas. Cuando las comunidades se defienden en las urnas, las corporaciones, los multimillonarios y sus aliados desembolsan millones para proteger las ganancias corporativas.

Las comunidades de California se han unido para evitar que los especuladores ausentes y las corporaciones multimillonarias impulsen el desplazamiento de viviendas y la crisis de las personas sin hogar. Hemos puesto un tope a los escandalosos aumentos de renta, hemos detenido los desalojos injustos, hemos recuperado nuestras viviendas y hemos aprobado políticas para limitar la influencia del dinero empresarial en las decisiones locales. Nos estamos organizando para asegurarnos de que los multimillonarios paguen su parte justa para que nuestras escuelas y comunidades puedan prosperar y los vecinos sigan conservando sus hogares.